El mural presenta una cautivadora secuencia de dos tigres de cuerpo completo sobre un fondo color ladrillo. Los tigres, con sus poderosas figuras, capturan la atención y añaden una sensación de fuerza y majestuosidad al diseño. El fondo color ladrillo aporta calidez y contrasta con la vitalidad de los tigres, creando una escena impactante. Este mural invita a los espectadores a apreciar la belleza y la elegancia de estos magníficos animales en su hábitat natural.
